Charles Mason

Antes de nada, debo decir que a mí Charles Manson no me gusta. Comprendo perfectamente la atracción que su figura ejerce en el mundo del rock y demas ámbitos contraculturales -debo reconocer que algunos aspectos de su historia son muy atrayentes-, pero... no siento simpatía por él. Y más adelante diré porqué.

La infancia de Manson fue, desgraciadamente, como la de tantos otros: digna de un telefilme casposo. Nació en 1934 como hijo de una prostituta y a muy temprana edad ya tenía antecedentes por robo a mano armada y violación de homosexuales. Cuando finalmente lo cogieron, el hombre estuvo en la cárcel hasta los 34 años. Cuando salió era 1968 y se encontró en plena vorágine hippie. La Costa Oeste de EEUU debió parecerle Jauja al bueno de Charlie, e intentó abrirse camino como músico. Era un fan de los Beatles -pero fan fan, freak fan, enfermizo -, así que intentó vender sus cancioncillas pop folk a diversos productores, entre ellos los de los mismos Beatles, pero le tomaron el pelo de mala manera. Bueno, si no podía ser músico, sería otra cosa.

Gurú. Líder de la Familia, una secta místico-satánico-apocalíptica. Drogas, sexo y el disco blanco de Beatles parecían ser la solución a todos los problemas de una panda de flower powers descerebrados. Y el esquizofrénico Manson descubrió una Biblia-Beatles Connexion que presagiaba un conflicto mundial entre blancos y negros, y en el que los 4 jinetes del apocalipsis no serían otros que los cuatro de Liverpool. Mucho tripi, amigo.

Para desencadenar tal conflicto, nada mejor que unas pequeñas masacres. Gary Hinman, profesor de música deudor de una pasta a algunos miembros de la Familia y, además, implicado en una operación de narcotráfico, es hallado muerto en su casa; había sido torturado y con su sangre habían escrito varias frases en las paredes, como "kill the pigs", "piggies" y "helter skelter". Lo de "pigs" y "piggies", además de hacer referencia a la policía, remitía al tema "Piggies" del disco blanco de los Beatles, al igual que "Helter Skelter", la canción más cañera que han escrito nunca éstos. Al poco tiempo la policía relacionó a Hinman con la Familia y Robert Beausoleil, uno de sus miembros, es detenido. Para proteger a su compañero, la Familia tiene la brillante idea de cometer más asesinatos: si aparecen nuevos casos con el mismo modus operandi, dejarán de sospechar de Beausoleil.

Así que en la madrugada del 9 de agosto de 1969, cuatro miembros de la familia se dirigen a Hollywood, a una casa que curiosamente antes estuvo habitada por Terry Melcher, hijo de la actriz Doris Day, y propietario de una discográfica que se había pasado por el forro el trabajo musical de Charles Manson. Su actual inquilina era la joven actriz Sharon Tate, embarazada de ocho meses y casada con Roman Polansky, uno de los mejores directores de cine que ha existido. Los miembros de la familia -entre ellos Susan Atkins, rebautizada por Manson como Sadie Mae Glutz en honor a la canción "Sexy Sadie" de... claro, Beatles- irrumpieron en la casa y asesinaron brutalmente a Sharon Tate, junto con cuatro invitados que tenían la mala fortuna de estar ahí esa noche. Éste es el principal motivo por el cual no me gusta este tío.

Realmente, Charles Manson nunca se manchó las manos de sangre; fueron sus acólitos los que cumplían órdenes. La noche siguiente repitieron el mismo juego en casa del empresario Leno LaBianca y su mujer Rosemary. Esta vez Manson también asistió, pero se limitó a observar -y tal vez arengar- a sus tres discípulos mientras éstos hacían su "trabajo". Pero ahí acabaron sus tropelías, porque al poco tiempo toda la basca fué detenida y condenada a cadena perpetua. Aunque hay que decir que los cogieron por puta casualidad, cuando investigaban unos casos de robos de coches e incendios, causados naturalmente por la Family.

Es decir, un individuo que, aunque fué el inductor material de varios asesinatos -cosa no poco grave, claro- nunca mató a nadie con sus propias manos, de repente se convierte en el serial killer más famoso de la Historia. Con tan sólo nueve asesinatos en su "curriculum", una minucia comparado con otros psicópatas, Manson es el monstruo más célebre del mundo. La razón de ello tal vez la encontramos en la situación que vivía Estados Unidos en esa época. Manson fué una estupenda cabeza de turco con la que arremeter contra "los niños de las flores". En plena era del "amor y paz" apareció un tipo que utilizó a una veintena de chiquillos descarriados -y endrogaos hasta las trancas- para sus propios fines, que no eran otros que dar comienzo a su personal holocausto pop teñido de no pocas fobias hacia los negros y de venganza contra los que no supieron apreciar su arte. Sus dioses eran los Beatles -recordad lo que dijo Lennon tiempo atrás con respecto a su grupo, y que levantó ampollas: somos más grandes que Jesucristo- y sus comparecencias en los tribunales, con una esvástica marcada a cuchilla en su frente, eran todo un espectáculo. La perversión del jipismo. El efecto mediático de todo ello fué enorme, y la fascinación que ejerce en el resto del mundo la "locura americana" ha convertido a Charles Manson en un auténtico icono de... no se sabe bien qué. Además hay que recordar que las personas que murieron a causa de sus paranoias eran famosos, "gente importante", y no cualquier prostituta, homosexual o niños anónimos, y eso es un bocado exquisito para el sector más amarillista de la prensa y la televisión.

Es indudable la influencia que después ha ejercido su caso en el rock. Así, a bote pronto, podríamos recordar...

-Manson publicó el álbum "Lie" el 6 de marzo de 1970 para poder financiar su defensa. Una de las canciones del álbum había sido grabada previamente por los Beach Boys, uno de cuyos miembros, Dennis Wilson, había sido colaborador cercano de la Familia.
-El tema "Glad to see you go" de los Ramones, cuya mínima mención a Manson vetó a la canción su permanencia en los charts radiofónicos.
-La versión siniesta de "Helter Skelter" interpretada por Siouxie & the Banshees.
-El tema "Deat Valley 69" de Sonic Youth. Death Valley era la zona donde tenia instalada su comuna la Familia y 69 es el año de la masacre en casa de Sharon Tate.
-Una versión del propio Manson que hacen los Lemonheads, no recuerdo el título.
-Una recopilación del sello Roir de las grabaciones de Manson.
-El nombre del grupo Marylin Manson...

La lista sería, seguro, muy larga.

Casi podríamos decir que Manson fué el primer punk, y tendría mis simpatías si no hubieran tocado a Sharon Tate -¡embarazada, por favor!- y jodido a Polansky. Ahí te pasaste, tío.